La hepatitis C es una infección del hígado causada por el virus de la hepatitis C (HCV, por sus siglas en inglés). El virus de la hepatitis C es un virus de ácido ribonucleico (ARN) que pertenece al género Hepacivirus y a la familia Flaviviridae. La infección puede transmitirse a través de sangre o fluidos corporales infecciosos y puede transmitirse durante el parto o a través del uso de drogas intravenosas o las relaciones sexuales. El virus de la hepatitis C puede causar tanto hepatitis aguda como crónica, desde una enfermedad leve hasta una grave, de por vida, incluyendo cirrosis hepática y carcinoma hepatocelular. La infección por hepatitis C se diagnostica mediante pruebas para detectar la presencia de anticuerpos y ARN del HCV. El tratamiento es de soporte, pero incluye agentes antivirales directos si la infección no se resuelve espontáneamente.
Última actualización: Ene 17, 2024
Diagrama de flujo de los virus de ARN
Imagen por Lecturio. Licencia: CC BY-NC-SA 4.0Estructura del virus de la hepatitis C:
Obsérvese el ARN de cadena simple y sentido positivo y las glicoproteínas incrustadas en la envoltura lipídica del virus, que median la entrada en la célula.
Los humanos son el único reservorio del virus. Los modos de transmisión incluyen:
Un individuo con una infección crónica de hepatitis C:
A) RM que muestra fibrosis hepática
B) Biopsia hepática que muestra fibrosis hepática en estadio 4 y actividad necroinflamatoria de grado 2
Un individuo con eritema nodoso debido a una infección crónica de hepatitis C
Imagen: “Erythema nodosum – Kolkata 2012-01-03 7753” por Biswarup Ganguly. Licencia: CC BY 3.0Anti-HBc: anticuerpo del núcleo de la hepatitis B
Anti-HBs: anticuerpo de superficie de la hepatitis B
HBcAg: antígeno del núcleo de la hepatitis B
HBsAg: antígeno de superficie de la hepatitis B
HBV: virus de la hepatitis B
HCC: carcinoma hepatocelular
HCV: virus de la hepatitis C
HDV: virus de la hepatitis D