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La púrpura trombocitopénica inmune (PTI), antes conocida como púrpura trombocitopénica idiopática, es una afección que se desarrolla de forma secundaria a la destrucción inmune de las plaquetas, lo que provoca trombocitopenia (recuento de plaquetas < 100 000/mm³). La púrpura trombocitopénica inmune puede ser primaria o secundaria debido a medicamentos o enfermedades subyacentes. El diagnóstico suele ser de exclusión. Muchos pacientes con PTI son asintomáticos. Cuando se presentan, los síntomas están relacionados principalmente con hemorragias (e.g., hematomas, petequias, epistaxis), pero también es frecuente la fatiga. La gravedad de la trombocitopenia en los pacientes con PTI es variable. Cuando el recuento de plaquetas desciende a < 20 000/mm³, aumenta el riesgo de hemorragias graves. El tratamiento puede incluir transfusiones de plaquetas, esteroides, inmunoglobulinas intravenosas y/o esplenectomía. Algunos casos remiten espontáneamente; otros tienen generalmente un buen pronóstico con una terapia adecuada.
Última actualización: Jul 14, 2022
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La púrpura trombocitopénica inmune es una trombocitopenia adquirida que resulta de autoanticuerpos dirigidos a antígenos plaquetarios.
Inicio:
Manifestaciones clínicas:
Indicaciones:
Hemorragia leve:
Hemorragia grave (gastrointestinal/intracraneal; recuento de plaquetas: < 10 000/mm³):
Terapias adicionales para hemorragias activas/persistentes:
Sin hemorragia y recuento de plaquetas > 30 000/mm³:
Evitar:
Episodios recurrentes/refractarios:
PTI post-esplenectomía/refractaria a esteroides: