Los pólipos colorrectales son crecimientos de tejido mucoso en el colon, el lugar más común de los pólipos en el tracto gastrointestinal. Los pólipos pueden clasificarse como neoplásicos o no neoplásicos y pueden estar asociados a síndromes genéticos. Los pólipos hiperplásicos no son neoplásicos y son el tipo más común en general, mientras que los adenomas son el tipo más común de pólipo neoplásico y tienen el potencial de progresar a cáncer. Para la mayoría de las personas sin síndromes hereditarios, el tamizaje del cáncer de colon debe comenzar a los 45 años y en la adolescencia en el caso de las personas con el raro síndrome de poliposis adenomatosa familiar. El diagnóstico se realiza mediante biopsia y el tratamiento incluye la vigilancia frecuente en personas con pólipos adenomatosos o el tamizaje cada 10 años en la población general hasta los 75 años.
Última actualización: Ene 16, 2024
Cada síndrome se presenta en <1% de la población y representa el 5%–10% de los cánceres colorrectales.
La mayoría de los pólipos colorrectales son asintomáticos y se descubren en el tamizaje rutinario para cáncer de colon.
El diagnóstico y el tratamiento definitivo de los pólipos colorrectales se consiguen mediante la extirpación endoscópica de todo el pólipo.
Pautas de seguimiento después de la colonoscopia y la polipectomía (basadas en la Actualización del Consenso 2020 por la U.S. Multi-Society Task Force sobre el Cáncer Colorrectal):