Advertisement
Advertisement
Advertisement
Advertisement
La otitis media aguda es una infección del oído medio caracterizada por inflamación de la mucosa y retención de líquido. Los patógenos más comunes son Streptococcus pneumoniae, Haemophilus influenzae, y Moraxella catarrhalis. La enfermedad puede presentarse con fiebre, otalgia y disminución de la audición. El diagnóstico se realiza mediante los antecedentes y otoscopía que muestra una membrana timpánica abultada con movilidad reducida. La observación o los antibióticos son los manejos habituales, sin embargo, la cirugía para la colocación de tubos de timpanostomía puede ser necesaria si hay infecciones recurrentes. Las posibles complicaciones son la pérdida de audición, la perforación de la membrana timpánica y la mastoiditis.
Última actualización: Mar 18, 2022
Advertisement
Advertisement
Advertisement
Advertisement
Advertisement
Advertisement
Advertisement
Advertisement
La otitis media aguda es una infección caracterizada por la acumulación de líquido y la inflamación dentro del oído medio.
La otitis media aguda es una afección inflamatoria del oído medio de etiología infecciosa que puede ser bacteriana (la más común) o vírica. Las causas incluyen:
Bacteriana:
Viral:
El oído medio está revestido de mucosa respiratoria y la cascada de acontecimientos que afectan a las zonas adyacentes suele reflejarse en cambios similares en el oído.
El diagnóstico de la otitis media aguda se basa principalmente en la presentación clínica y el examen otoscópico. No se necesitan pruebas de laboratorio ni de imagen, a menos que haya circunstancias especiales.
Observación:
Control del dolor:
Antibióticos:
Pueden producirse dos tipos de complicaciones.
Complicaciones intratemporales:
Complicaciones intracraneales: