El hiperparatiroidismo es una condición asociada a niveles elevados de la hormona paratiroidea (PTH, por sus siglas en inglés) en la sangre. Dependiendo de la patogénesis de esta condición, el hiperparatiroidismo puede definirse como primario, secundario o terciario. El hiperparatiroidismo primario es una enfermedad inherente a las glándulas paratiroides asociada a una secreción anormal de PTH. El hiperparatiroidismo secundario es el resultado de anomalías en el metabolismo del calcio que, si no se trata, pueden evolucionar a un hiperparatiroidismo terciario, que se asocia a una hipertrofia de la glándula paratiroidea y a una hipersecreción de PTH incluso si se elimina la causa primaria. El diagnóstico se basa en los parámetros bioquímicos, que incluyen los niveles séricos de PTH, calcio y fosfato, así como el calcio urinario. El tratamiento se basa principalmente en la paratiroidectomía quirúrgica para el hiperparatiroidismo primario y terciario. El manejo del hiperparatiroidismo secundario se centra en el tratamiento de la enfermedad subyacente.
Última actualización: Dic 25, 2022
El hiperparatiroidismo es una enfermedad asociada a niveles elevados de la hormona paratiroidea (PTH) en la sangre.
Adenoma paratiroideo que afecta a la glándula paratiroidea superior derecha
Las otras tres glándulas se muestran de forma prominente, pero las paratiroides normales son más pequeñas de lo que parecen (tamaño normal, 3-5 mm; 30-60 mg cada una).
Hiperparatiroidismo primario:
Hiperparatiroidismo secundario:
Hiperparatiroidismo terciario:
La hormona paratiroidea solo tiene una función: corregir la hipocalcemia y mantener el nivel sérico de calcio dentro de unos límites estrechos.
Si el calcio sérico es bajo, las cuatro glándulas paratiroides secretan PTH, que se fabrica y almacena en las glándulas. Cuando se libera, la PTH trabaja con y a través de la vitamina D para restablecer el nivel de calcio a la normalidad.
Más del 50% de los pacientes son asintomáticos o presentan síntomas inespecíficos.
Mnemotecnia para el PH: Piedras, huesos, quejas y lamentos:
Otros síntomas son:
Radiografía de la mano en una mujer de 64 años con hiperparatiroidismo secundario leve y una larga historia de tejido de punto, que muestra resorción ósea subperióstica en ambas falanges terminales del pulgar.
La reabsorción ósea debida al hiperparatiroidismo suele observarse en las puntas de las falanges y en las caras radiales de las falanges medias del segundo y el tercer dedo. La localización inusual en los pulgares en este paciente puede deberse a una combinación de traumatismo repetitivo e hiperparatiroidismo.
Radiografía del miembro inferior izquierdo en dos vistas ortogonales que muestra una osteítis fibrosa quística que se presenta como un espacio óseo quístico/lítico lleno de tejido fibroso pardo (flechas) conocido como «tumor pardo»:
Hoy en día, los tumores pardos son menos frecuentes en el hiperparatiroidismo porque la enfermedad suele diagnosticarse en una fase más temprana.
Tratamiento médico:
Cirugía:
Adenoma paratiroideo (flecha) con cambio quístico:
El tumor se extiende hasta el surco traqueo-esofágico derecho.
La gammagrafía paratiroidea con sestamibi reveló un aumento de la captación focal compatible con un adenoma paratiroideo en el polo inferior izquierdo de la glándula tiroides
Imagen: “Serial pathologic fractures of five long bones on four separate occasions in a patient with primary hyperparathyroidism, challenges of management in a developing country: a case report” por Olatoke, S.A., et al. Licencia: CC BY 2.0a: Adenoma paratiroideo gigante tras su resección y fijación en formol
b: Secciones transversales de la masa multiloculada
c: Vista microscópica de bajo poder de las células adenomatosas en la parte superior derecha de la fotografía, adyacente al tejido fibroso grueso de color rosa; un pequeño grupo de tejido glandular tiroideo normal comprimido está en la esquina inferior izquierda.
Tratamiento médico: