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Los abscesos perianales y perirrectales son acumulaciones de pus en el espacio cerrado cerca de los tejidos perirrectales. Estas infecciones se originan por la obstrucción de las glándulas de las criptas anales. Los pacientes presentan dolor severo en el área anal o rectal. Encontrar una masa fluctuante y sensible en el examen físico puede proporcionar el diagnóstico. El tratamiento requiere incisión quirúrgica y drenaje rápidos, que pueden ir seguidos de un ciclo de antibióticos en algunos casos. Sin tratamiento, estos abscesos pueden conducir a la formación de fístulas.
Última actualización: May 8, 2022
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Las glándulas anales, que se encuentran en el plano interesfinteriano, drenan en criptas que se encuentran a lo largo de la circunferencia de la línea dentada/pectínea. La infección de una cripta glandular obstruida puede ocurrir debido a:
Bacterias comunes:
La clasificación de los abscesos anorrectales se basa en su ubicación.
Los síntomas de un absceso perirrectal o perianal pueden variar según su ubicación, pero pueden incluir:
Inflamación, eritema y drenaje perianal debido a un absceso perianal
Imagen: “Localization of the perianal abscess” por Department of Urology, University Hospital Center, Fez, Morocco. Licencia: CC BY 2.0El diagnóstico de un absceso perianal o isquiorrectal usualmente se realiza clínicamente. Sin embargo, la tomografía computarizada (TC), la resonancia magnética (RM) o el ultrasonido pueden ser útiles para identificar:
Drenaje quirúrgico:
Terapia con antibióticos:
Cuidados postoperatorios: